Cómo afrontar un pinchazo y no perder un segundo de más

Paso 1: Lo primero es no perder los nervios y asumir que vas a tener que ponerte manos a la obra. Antes de nada deberás retirar la rueda. Para ello solo tendrás que salir del camino principal, buscar un espacio amplio, cómodo y dar la vuelta a tu bici para comenzar a aflojar los cierres. Debes tener cuidado si tienes que cambiar la rueda trasera porque los frenos y la cadena pueden complicarte el trabajo. Pero independientemente de la posición ¡recuerda! un buen truco es usar una herramienta multillave.

Paso 2: Una vez tengas la rueda en tu mano es fundamental identificar el pinchazo. Si no lo ves a simple vista cuando gires la rueda puedes pasar la mano por encima e intentar sentir el agujero o el cuerpo extraño que ha producido la avería. Una vez lo tengas controlado es el momento de comenzar a desmontar la cubierta con ayuda de un set de desmontables, que te va a facilitar mucho la vida.

Paso 3: Con la cámara fuera del neumático tienes dos opciones. La primera es colocar un parche sobre el pinchazo, un remedio simple y eficaz si no te queda mucho camino para llegar a casa. Pero ¡cuidado! colocar un parche tiene su técnica y te recomendamos leer detenidamente las instrucciones. Aunque básicamente consiste en aplicar un poco de líquido vulcanizante tanto en la zona del pinchazo como en el parche, esperar unos segundos a que haga su trabajo, pegarlo sobre el agujero apretando con fuerza para que no queden burbujas y dejar secar unos minutos.

La otra posibilidad es colocar una cámara nueva (la opción más rápida) y así te aseguras de poder seguir pedaleando sin problema durante mucho más tiempo. Una vez llegues a casa puedes parchear con calma la cámara pinchada para que te quede en perfectas condiciones.

Sea cual sea la opción que elijas, usa un hinchador de ruedas o un cartucho de CO2 para volver a llenar de aire tu cámara.

Paso 4: Tras hinchar la cámara ahora toca hacer el camino a la inversa. Lo primero es introducirla con mucho cuidado sobre la llanta y una vez esté insertada hay que colocar la cubierta con delicadeza (para este último paso puedes volver a utilizar los desmontables, así no te dejarás los dedos en el intento). Con la cámara y la cubierta en su sitio es el momento de hinchar el neumático con la presión adecuada (si no quieres volver a pinchar).

Paso 5: Ahora que has comprobado que tu rueda está como nueva y que vas a poder llegar a casa pedaleando solo te queda volver a montarla en tu bici. Para ello, debes tener en cuenta el tipo de freno que lleva, para colocarla correctamente, la cadena y el resto de sistemas que van conectados a la rueda.

Aunque no existe un truco infalible si puedes tomar medidas para evitar que tus ruedas se pinchen con facilidad. En Ebike-on puedes encontrar unas cámaras más resistentes que previenen estos accidentes y son muy ligeras como las Tubolito o el líquido anti-pinchazos Muc-off listo para aplicar en el interior de la cámara. También puedes encontrar cubiertas sin cámara de aire, más conocidas como Tubeless, que lleva un líquido especial que tapa los pinchazos.

Pero sea cual sea tu opción, lo que nunca puede faltar en tus salidas son tus herramientas de reparación y kit antipinchazos porque ¡nunca se sabe cuando puedes tener un susto con tu rueda!